No es difícil entender cómo Moonstone, un cristal luminiscente blanco, obtuvo su nombre. La antigua tradición hindú sostenía que Moonstone contenía rayos de luna atrapados. En la antigua Roma, se pensaba que Moonstone recibía su brillo nacarado de la luz almacenada de la Luna.
Los antiguos griegos combinaron los nombres de la diosa de la Luna, Selene, y la diosa del amor, Afrodita, y llamaron a este cristal Aphroselene.
Moonstone se conocía como la “Piedra del Viajero”; ya que los viajeros creían que el cristal los protegería y ayudaría a iluminar su camino. Sin embargo, Moonstone no es solo una piedra para la buena suerte de los viajeros, se cree que es una piedra de buena suerte para todos. Su brillante resplandor incluso llevó a leyendas de que chupar Moonstone podría revelarte tu destino.
La piedra lunar es parte de la familia mineral de los feldespatos. Es una piedra opalescente que se puede encontrar en forma incolora, melocotón, rosa, verde, gris, amarillo, marrón y azul. El juego de luces visto en Moonstone se llama adularescencia, y su claridad varía de transparente a opaca.
La piedra lunar más preciada es la de Sri Lanka y la India. Las piedras lunares azules son muy valoradas por su rareza. Estas piedras solo se pueden encontrar en Sri Lanka. India es famosa por producir Rainbow Moonstones. Las minas de piedra lunar históricamente más interesantes se encuentran en las montañas Adula de Suiza. Otras minas en todo el mundo se pueden encontrar en Myanmar, Brasil, Noruega, Estados Unidos, Australia, Alemania, Tanzania, India y Madagascar.